¿Quién era la China Poblana?
La historia dice que China Poblana era hija de un rey mogol y que durante una guerra fue capturada como esclava. Fue vendida en Filipinas a un mercader y luego a otro comerciante que la trajo a México en la Nao de Manila en el siglo XVII.
Al igual que la historia de La Malinche, fue esclavizada y pasó de mano en mano hasta encontrar un protector que la adoptó y la educó como a una hija.
En la adolescencia, se casó con un mercader en la ciudad de Puebla de los Ángeles y vivió allí durante 70 años.

Su estilo de vestir con fuertes colores y originalidad en corte y estilo llamó la atención en una sociedad que solo tenía tres modelos de ropa para mujeres: trajes indígenas elaborados con algodón y bordados a mano, vestimenta importada de España con sedas y terciopelos para las clases altas y ropa burda y ruda para las mayorías desposeídas.
La China Poblana revolucionó el mundo de la moda con su atuendo audaz: usaba chalinas y sayas de seda de colores brillantes, peinetas y alamares desconocidos en Nueva España, camisas de tela rauda con bordados, y enaguas con sobrepuestos de chaquira y lentejuelas.
Con el tiempo, el traje de China Poblana se convirtió en la vestimenta nacional y consiste en una camisa blanca de manga corta con escote bordado con motivos brillantes, una falda larga roja oscura con bordados patrios en el frente, un rebozo fino de seda de los colores de la bandera nacional, y un chongo trenzado con moños tricolores, collares de cuentas de papelillo y grandes arracadas de oro.
Las cantantes de música ranchera del siglo XIX y las intérpretes de la canción bravía en el siglo XX llevaron con elegancia el traje de China Poblana y lo adaptaron al gusto de las diferentes regiones y épocas del país.